Gemma se pega la sobrada de dormir 11 horas…. Yo no
aguanto tanto, pero descansamos como reinas.
A las 10 hemos quedado para el Ocean safari. Vamos
un poco desinfladas porque nos han dicho que en los últimos cuatro días no han
visto tiburones ballena y era el motivo por el que, en primera instancia,
vinimos a este viaje. Pero bueno, somos unas mujeres optimistas y no perdemos
la esperanza. Además, el avistamiento de ballenas y delfines está casi
asegurado!
Estamos alucinadas con la cantidad de gente que
hay… llenamos tres botes con 14 personas cada uno!! Los botes son “Speed boats”
y eso supone ir sin nada que se pueda mojar (adiós a mi cámara) y hacer
parafernalias para subir y bajar del bote…. Nada nada cómodo.
La empresa que hemos elegido para llevar a cabo
esta actividad es de las mejores valoradas en tripadvisor, sin embargo, nuestra
reseña va a ser bastante negativa. No nos ha gustado como dan las
explicaciones, ni como te tratan ni como lo tienen organizado… y eso que el
dueño ayer nos pareció un tipo muy majo y honesto… Las explicaciones son
rápidas y confusas, además de hacerlas únicamente en ingles, para hablarte de
los tiburones ballena te ponen un vÍdeo malo en una tele diminuta (para eso lo
veo tranquilamente en el sofá de mi casa) y el rollo de los botes rápidos y
como llevan a cabo la excursión no nos gusta en absoluto. Este tipo de botes es
para ir a toda velocidad, pero cada vez que te tiras al agua y vuelves a subir
es un auténtico sufrimiento… no sé que les costaría poner una escalerita de
cuerda, la verdad. En cada barca llevamos al conductor y a otro chaval joven
que no explica nada, y lo poco que hace lo hace para el cuello de su camisa.
Con la velocidad y los motores a toda marcha, no se oye absolutamente nada.
Total que te ves, como una tonta, haciendo lo que todos hacen… de repente paran
la barca y todos al agua… ¿habrá un tiburón ballena? ¿serán delfines?? Abajo
nos miramos los unos a los otros tratando de entender qué tenemos que buscar…
ah! Era un delfín allá en las profundidades! Ala, otra vez arriba con todas las
dificultades que eso supone…. ¿os creeis que alguno echa una mano?? Al final
somos los propios pasajeros los que nos ayudamos los unos a los otros. Eso si,
unas cuantas risas nos echamos..
Al comienzo, el bote va tranquilo, a la búsqueda de
ballenas o de tiburones ballena. Pasa cerca de algunas ballenas, porque la
verdad que de lejos se ven muchas, pero entre que ellas son tímidas y que ellos
no se entretienen mucho, no disfrutamos mucho de su compañía. Así nos pasamos
por lo menos una hora o más… la gente dentro del barco ya bosteza y empieza
todo el mundo a aburrirse. Al final, para que nos vayamos con buen sabor de
boca y darle un poco de emoción al tour, la barca comienza a ponerse a toda
velocidad de aquí para allá, persiguiendo a unos pobres delfines y haciéndonos
bajar al agua 4 o 5 veces para verlos… Los pobres, cada vez que nos tiramos
todos al agua, se largan a las profundidades, qué tú no lo harías?? En fin, yo
a la tercera vez decido no volver a tirarme y otros tantos hacen lo mismo que
yo… en la última inmersión se tiran dos y es en ese momento cuando los delfines
se sienten menos agobiados y aguantan algo más en superficie.
Luego en el camino de vuelta se ponen con la barca
a toda velocidad haciendo carreras entre ellos y la llegada a la playa ya es
espectacular… menuda fantasmada! Lo que hacen es ponerse cara la playa, nos
piden que nos cojamos todos muy bien y que en cuanto el barco llegue a la
arena, corriendo saltemos del bote y nos alejemos porque corre peligro nuestra
seguridad…. ¿?? Lo que hacen es poner el bote a toda velocidad para con esa
fuerza sacar la proa a la playa y así poder remolcarlo con el tractor. Pero
vamos, la parafernalia y la fantasmada se las trae… En fin, un fiasco de tour… tripadvisor por una vez nos ha fallado!
Hombre, estoy segura de que si hubiéramos visto
tiburones ballena, hubiéramos aguantado todas estas chorradas con otro humor…
Mientras tanto, Aaron, el americano de la casa, nos
ha mandado un mensaje para decirnos que como en la casa de arriba de la nuestra
no tienen ahora inquilinos, podemos usar
las zonas comunes para cocinar y descansar. Mientras yo lo espero para que me
explique cómo funciona todo, Gemma se baja con la tabla de surf (que tb tiene
la casa) a la playa. Hay pocas olas, así que se vuelve enseguida, lo intentará
mañana por la mañana.
La casita que nos ceden es una maravilla, con una
terraza espectacular con vistas al mar que vamos a disfrutar de lo lindo!!
Comemos en el Tofo Tofo, primero en la lista de
Tripadvisor. Esta vez sí que acierta… Es un restaurante regentado por una mujer
local que por un precio asequible, te ofrece una comida estupenda. Yo elijo la
pasta a la marinera y Gemma el pollo y una sopa de verduras. El volumen de
pasta que me ponen desborda el plato y la cantidad de pescado, pulpo y gambas
es abundantísima… y todo por 5 euros.
Por la tarde damos paseo por el pueblo, compramos
unos preciosos batik para casa y tras hacer algo de compras, nos vamos a
disfrutar de nuestra estupenda terraza, y aquí nos encontramos todavía!!
Cena ligerita y a dormir!
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